Javier Peños Fernández
22/03/2019
La publicidad forma cada vez más parte de nuestra vida y constantemente nos vemos bombardeados por anuncios, promociones y patrocinios de marcas sin que seamos conscientes de ello. La publicidad está evolucionando hasta el punto de integrarse en nuestro día a día, acompañándonos allá donde vamos.
Muchas veces y a pesar de que nos están vendiendo productos de manera constante y obvia, nos hemos acostumbrado tanto que no nos damos cuenta y lo entendemos como algo natural, estamos en el punto en el que lo hemos normalizado.
Vamos a ver algunos de estos ejemplos que pasan desapercibidos y otros que no tanto.
El primer ejemplo viene de la mano de la serie The Big Bang Theory, una sitcom estadounidense que en España lleva mucho años teniendo éxito y que a día de hoy podemos disfrutar en la cadena Neox. Podemos disfrutar de esta serie de lunes a viernes de 17:00 a 18:30 y de 21:00 a 22:00.
Estamos hablando de lo que se conoce como Product Placement.
Es bastante habitual que muchas marcas o productos, dentro de un programa y sin que el espectador se muy consciente de ello, se publiciten evitando alterar el ritmo del programa. La mayoría de casos en los que nos podemos encontrar esta publicidad se da sobre todo en los espacios de ficción, como es The Big Bang Theory.
En este caso en concreto, la marca anunciante es Alienware, una marca que se dedica a la creación de ordenadores, tanto portátiles como de sobremesa y también consolas de juegos.
Este tipo de publicidad es muy abundante porque al espectador, verla se le hace como algo normal, ve que un personaje de ficción al que tiene mucho cariño utiliza un producto que él mismo podría usar. Además, este tipo de estrategias son muy baratas y eficaces.
El segundo ejemplo se encuentra en el programa El intermedio. Estamos hablando de lo que se conoce como Telepromoción. El programa se puede ver en La Sexta, de lunes a jueves a las 21:30.
Esta técnica consiste en la oferta de una relación entre el producto o marca anunciado y el programa en el que los protagonistas hablan de este en un contexto irreal. Si bien es cierto que se considera como una variante de la publicidad ya muy usada, a día de hoy su uso sigue estando bastante extendido.
El ejemplo en concreto lo protagoniza Dani Mateo, que en mitad del programa anuncia la marca de buscadores de seguros de coche llamada Rastreator. Esta telepromoción está muy bien hecha, porque se aprovecha que Dani Mateo es un cómico y el programa en el que se anuncia el producto se caracteriza por su tono humorístico. Por ello, la promoción se basa en el humor, en hacer reír al espectador incluso cuando le están haciendo publicidad a una marca, consiguiendo que el espectador que no se salga del programa a pesar de la publicidad.